Hoy por hoy al escuchar el nombre de Conor McGregor, la mente de las personas se torna hacia músculos, fuerza y éxito. Sin embargo, hace una década esto no era así. Pues, hace tan solo diez años atrás, la actual estrella de la UFC se ganaba la vida como fontanero en Dublín.
Después de mucho trabajo y perseverancia los grandes sueños del irlandés han rendido sus frutos. Así, la revista Forbes le ha incluido en la lista de los cien deportistas mejor pagados del planeta.
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El complicado camino hacia la cima
La historia de Conor McGregor bien podría ser el guión de una inspiradora película. Los altibajos en la vida del luchador lejos de derrotarlo le han fortalecido. El joven irlandés de 30 años ha sabido convertir sus sueños en una vida real. Así, ha logrado transformar una situación desafortunada en grandes oportunidades.
Víctima de bullying
En la época de colegio en su país natal, McGregor fue blanco de acoso escolar. Esto debido a que por aquel entonces, era un chico de poca estatura y muy delgado. Sin embargo, fue el bullying propinado por sus compañeros lo que lo llevó a entrenarse en la disciplina de Artes Marciales Mixtas.
En aquellos momentos tan solo contaba con 16 años de edad, y lejos de esperar hacer una prominente carrera deportiva, sólo deseaba poder defenderse dentro de las aulas y al acoso que estaba sometido.
De fontanero a luchador
Desde el primer momento que se introdujo al mundo del combate, los entrenadores notaron cierta chispa en él. Así, consiguió consolidarse en el mundo del boxeo, para pasar luego a las artes marciales mixtas.
Conor McGregor proviene de una humilde familia donde el oficio de la fontanería era lo único que llevaba comida a la mesa. Por esta razón, dividía su tiempo entre el negocio familiar y las luchas. Por mucho tiempo, incluso después de su debut profesional, el luchador aún se dedicaba a la fontanería.
Llegado el momento, decidió dedicarse de lleno como luchador profesional, pero necesitó varios títulos para conseguir la oportunidad que le cambiaría la vida. Así, durante varios meses el irlandés debió sobrevivir con los 188 euros semanales de asistencia alimentaria que le brindaba el Estado.
Campeón de la UFC
Los títulos ganados al inicio de su carrera, no lograron otorgarle la libertad económica que muchos piensan. Sin embargo, sí le permitieron abrirse paso hacia la UFC. Para el año 2013, con tan sólo 25 años, Conor McGregor firmó su primer contrato con el gigante de las luchas cuerpo a cuerpo.
Tan sólo un par de años más tarde, el que era un delgadillo chico irlandés alcanzó el máximo título de la UFC en la división peso pluma. También le valió para hacerse con el récord del K.O. más rápido de la historia de la UFC. En la actualidad, es uno de los luchadores con más victorias en sus espaldas. Además, sus problemas de dinero lógicamente acabaron.
Un lugar en la lista Forbes
Tras varios años de carrera en la UFC, cientos de victorias y diversos títulos, McGregor se ha convertido en uno de los luchadores más conocidos de las artes marciales mixtas. Pasando de vivir del día a día a formar parte de los más adinerados del planeta.
Así, durante los últimos años, Forbes lo ha incluido en la lista de los deportistas mejor pagados. El ranking de este año le posiciona en el cuarto lugar de los deportistas mejor pagados del mundo. Esto con un ingreso neto que exceda los 99 millones de dólares anuales. Le siguen Cristiano Ronaldo con 108 millones y Messi con 111 millones. En la cúspide de la lista se encuentra el boxeador norteamericano Floyd Mayweather con más de 275 millones de ganancias anuales.