Trump y Bolsonaro reafirman sus alianzas

Bolsonaro y Trump en la Casa Blanca

La visita de Jair Bolsonaro a los Estados Unidos ha tenido una gran repercusión, principalmente en Brasil. El hecho de que sea el primer viaje al extranjero del presidente brasileño es una señal de lo importante que ve su relación con los Estados Unidos. “Es el comienzo de una asociación centrada en la libertad y la prosperidad, algo que todos los brasileños hemos deseado desde hace mucho tiempo”, dijo, mientras partía para Washington, agregando que era la primera vez en un momento que un programa El presidente brasileño estadounidense visitó la capital estadounidense.

Un nuevo capítulo

Antes de la reunión, un alto funcionario de la administración habló de un “histórico” rehacer la relación entre Estados Unidos y Brasil. Una relación que “siempre ha sido de potencial, pero sin embargo, siempre parece que ese potencial nunca se ha alcanzado”, dijo el funcionario. “Esta vez, es diferente. Realmente habrá un eje norte-sur de las dos economías más grandes del hemisferio occidental”.

Ciertamente son palabras que agradarán a Jair Bolsonaro, el hombre apodado “Trump of the Tropics”, quien, al parecer, finalmente ha encontrado a su ídolo. “Siempre he admirado los Estados Unidos y este sentido de admiración solo ha aumentado desde que asumió el cargo”, dijo Bolsonaro al Sr. Trump mientras ofrecían una conferencia de prensa conjunta en el Jardín de Rosas. A veces, durante este viaje, suena como un súper fan de Trump en lugar del líder de una de las economías más grandes del mundo.

Aliados de derecha

No hay duda de que los dos líderes tienen mucho en común. Para empezar, su ascenso a la cima tomó a ambas naciones por sorpresa. Ambos son antiinmigrantes, priorizan los intereses económicos nacionales por encima de todo lo demás y comparten una preocupación por cambiar la suerte de sus naciones. Tanto es así, el Sr. Bolsonaro incluso ha adoptado el eslogan de la campaña del Sr. Trump.

“Queremos tener un gran Brasil al igual que Trump quiere tener una gran América”, dijo Bolsonaro a la audiencia en la Cámara de Comercio de los EE. UU. El lunes por la noche, repitiendo una frase muy utilizada por los brasileños.

Y de acuerdo con el señor Bolsonaro, no es solo una conexión económica que existe entre los dos países. “Creemos en la familia, en Dios, estamos en contra de la corrección política, no queremos una ideología de género, queremos un mundo de paz y libertad”, dijo. “Necesitamos trabajar duro para asegurarnos de que estos objetivos se alcancen”.

Relación desigual

Pero para algunos, esta visita ha sido considerada como mucho más importante para el líder brasileño y sus partidarios en casa que para Trump. “No creo que Trump esté interesado en establecer algún tipo de relación personal con Bolsonaro”, dice Oliver Stuenkel, profesor de Relaciones Internacionales en la Fundación Getulio Vargas en Sao Paulo.

“Estados Unidos mira esto y dice que apreciamos tu amor, no es que nos importe tanto como a ti, y si hay algo que puedas darnos, estaremos encantados de darte algo a cambio”. El señor Trump se ha acercado: dijo que alentaría los esfuerzos para otorgar privilegios a la OTAN de Brasil y ayudar al país a ser miembro de la OCDE. Música para los oídos de Sr. Bolsonaro, aunque en la práctica, hay mucho que hacer detrás de escena para que eso suceda.

Juntos por venezuela

Pero el único aspecto que unirá a los dos líderes más inmediatamente es Venezuela. Han tenido un buen comienzo con su odio compartido hacia la política socialista. “La hora del crepúsculo del socialismo ha llegado a nuestro hemisferio”, dijo el Sr. Trump el martes por la tarde.

“Lo último que queremos en los Estados Unidos es el socialismo”, y agregó que el señor Bolsonaro, quien ha sido muy público en su condena de la política de izquierda en Brasil, sería alguien a quien consultaría para seguir adelante. Estados Unidos ha dicho que todas las opciones permanecen en la mesa cuando se trata de Venezuela, pero la posición del Sr. Bolsonaro no es tan clara.

“Si Bolsonaro intenta decir que todas las opciones están sobre la mesa, su vicepresidente y los ministros que son ex generales de cuatro estrellas le recordarán que Brasil no participará en una operación militar para destituir a Maduro del poder porque piensan que será así. complicar las cosas “, dice Paulo Sotero, director del Instituto Brasil en el Centro Wilson en Washington DC. “Aquí es donde viene la prueba del liderazgo”.

Por ahora, sin embargo, tanto el Sr. Bolsonaro como el Sr. Trump pueden darse una palmada en la espalda para una visita exitosa. Tener amigos de la derecha en América del Sur ayudará al señor Trump, pero la relación de los Estados Unidos con la región nunca ha sido tan sencilla.

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