El presidente iraní, Hassan Rouhani, anunció el miércoles que su país terminará su cumplimiento con dos condiciones particulares del acuerdo nuclear del país. Se produce exactamente un año después de que el presidente Donald Trump anunciara la retirada de Estados Unidos del acuerdo que desde entonces ha recibido soporte vital, mientras los signatarios europeos, rusos y chinos intentan salvarlo.
Rouhani no señaló el final del acuerdo por completo, pero le dio a Europa un ultimátum: Tendrá 60 días para seguir al gobierno de Trump o para reanudar el comercio de petróleo con Irán para salvar el acuerdo, violando las sanciones de Estados Unidos. Si no se hace esto último, Teherán volverá al enriquecimiento de uranio de alto nivel, dijo el líder iraní. «El camino que hemos elegido hoy no es el camino de la guerra, es el camino de la diplomacia», dijo Rouhani en un discurso televisado. «Pero la diplomacia con un nuevo lenguaje y una nueva lógica».
A partir del miércoles, Irán mantendrá uranio enriquecido no gastado en lugar de venderlo, lo que había estado haciendo bajo las estipulaciones del acuerdo nuclear de 2015. Esto ayudará a construir su almacén de uranio poco enriquecido y agua pesada, que se utilizan en reactores nucleares. Si Europa no se toma el paso para salvar el acuerdo y proteger los sectores petrolero y bancario de Irán de las sanciones de Estados Unidos, dijo Rouhani, reiniciará la construcción de su reactor nuclear Arak, que era capaz de producir plutonio apto para armas y que había sido cerrado de la oferta de 2015.
Se dice que el nivel de enriquecimiento de uranio de Irán se encuentra actualmente en poco más del 3%, según lo permite el acuerdo nuclear para la generación de energía. Los expertos dicen que el enriquecimiento debe estar en torno al 90% para construir una bomba, de la que Irán se encuentra muy lejos. Pero los gobiernos en Occidente temen que el programa atómico de Irán pueda permitir que eventualmente construya armas nucleares, algo en organismos internacionales como el Organismo Internacional de Energía Atómica y la ONU dijeron que el acuerdo de 2015 estaba efectivamente impedido.
Rusia culpa a Estados Unidos, y Europa está preocupada
Los funcionarios rusos tomaron las noticias como una oportunidad para criticar la política de Estados Unidos, y culparon a la presión externa de Washington como la causa del retroceso de los compromisos de Irán por parte de Irán. El ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Lavrov, dijo el miércoles que espera que los signatarios europeos cumplan con sus obligaciones en virtud del acuerdo. El ministro de Relaciones Exteriores iraní, Javad Zarif, dijo a Lavrov el miércoles que la decisión de Teherán era legal y reversible. «Los pasos que hemos tomado hoy están dentro del marco del acuerdo», dijo desde Moscú. «Y se pueden revertir. Hay una ventana de 60 días para la diplomacia».
El Reino Unido advirtió sobre las consecuencias si Irán renuncia a sus obligaciones con el acuerdo, y un portavoz de la primera ministra, Theresa May, dijo: «Estamos sumamente preocupados por este anuncio e instamos a Irán a que continúe cumpliendo con los compromisos asumidos en el acuerdo y no tome medidas escalonadas». … Nos aseguraremos de que (el acuerdo) se mantenga vigente mientras Irán respete estos compromisos «.
Francia reiteró su apoyo al acuerdo, pero advirtió que el abandono por parte de Irán de sus obligaciones conduciría a un posible desencadenamiento de los mecanismos de sanciones por parte de Europa. Los estados miembros de la UE han creado un «vehículo de propósito especial» para eludir las sanciones de los Estados Unidos y seguir haciendo negocios con Irán llamado INSTEX, lo que enoja a los Estados Unidos, pero se dice que el vehículo tiene una eficacia limitada.
La ministra de Defensa francesa, Florence Parly, dijo en una entrevista en la radio local que el pacto nuclear había sido socavado durante meses. «Hoy, nada sería peor que el propio Irán, dejando este acuerdo», dijo.