La batalla de Covadonga ¿mito o realidad?

Don Pelayo Batalla de Covadonga

El 28 de mayo del año 722 en Covadonga (Asturias), Don Pelayo, monarca del reino de Asturias, dirige un ejército de poco más de 300 combatientes y se dispone a plantar cara al invasor musulmán. Los cristianos de Don Pelayo emboscan a los sarracenos en la cueva de Covadonga y su ofensiva se salda con una gran victoria, el primer triunfo contra las fuerzas árabes. Cuentan que llegaron a morir hasta más de 100.000 musulmanes, superados por la brillantez estratégica de Don Pelayo. Es el inicio de la conocida como Reconquista y el comienzo del declive musulmán.

Hasta aquí lo que cuenta la leyenda desde el punto de vista cristiano pero ¿qué ocurrió en realidad? ¿existió realmente esta crucial batalla? ¿Sus consecuencias fueron tan importantes? La leyenda siempre ha suscitado controversias pero ha sido en los últimos años cuando historiadores españoles han empezado a cuestionar seriamente la existencia de esta batalla y su trascendencia.

La batalla de Covadonga como invención cristiana

Los historiadores que han empezado a cuestionar la verosimilitud de la batalla de Covadonga insisten en que las fuentes consideradas para rememorar este hecho siempre han sido cristianas, obviando completamente los relatos de narradores musulmanes de la época o posteriores.

Don Pelayo Batalla de Covadonga
Covadonga, Asturias – Imagen de Pixabay.

Los cronistas musulmanes no niegan la existencia de la batalla pero minimizan la relevancia de la misma, que consideran como una escaramuza más entre los sarracenos y caudillos locales que se resistían a la ocupación.

Una invención propagandística de Alfonso III

Los indicios arqueológicos y el contraste de diversas fuentes por parte de historiadores contemporáneos llevan a concluir que los cronistas musulmanes no estaban muy desviados respecto a la verdad de los hechos y que la batalla de Covadonga no fue sino una escaramuza más entre cristianos y musulmanes. Al parecer, los sarracenos dejaron de hostigar a los hombres de Pelayo pues consideraban que no merecía la pena desperdiciar más vidas y esfuerzos en un territorio astur que consideraban poco útil.

Algunos de estos investigadores apuntan a que el mito de la batalla de Covadonga probablemente naciera de la necesidad de asegurar su reinado por parte de Alfonso III, ya en fechas alrededor del 900. Esta batalla se convertiría, por parte de los cronistas del rey cristiano, en un mito fundacional y legendario destinado a legitimar la Reconquista.

La importancia del mito

No obstante, pese a las últimas evidencias en contra del mito, muchos asturianos se resisten a renunciar a la veracidad del mismo. Don Pelayo es uno de los mayores héroes que ha dado Asturias y su figura está idealizada desde la enseñanza en los colegios, como prototipo de héroe astuto, infatigable e idealista, triunfador ante un enemigo muy superior. Para numerosas personas, España no sería la que es sin la batalla de Covadonga y la iniciativa de Don Pelayo, cuya dimensión épica es casi paralela a la de otro mito cristiano hostigador de musulmanes de similar época, Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador.

3 thoughts on “La batalla de Covadonga ¿mito o realidad?

  1. Les sugiero que lean en Internet >covadonga mito griego pdf> , y si quieren profundizar en el tema mi “Carlomagno, Asturias y España” (Oviedo, 2002).
    Saludos. Guillermo Gª. Pérez.

  2. Batalla de Covadonga existió ….obviamente fue una pequeña batalla pero resultó en una aplastante derrota para los invasores musulmanes ….por lo que tienen sentido que se significara como el inicio de la reconquista

    Es cierto que tras Covadonga las montañas de Asturias tuvieron un período de relativa calma pues los musulmanes ante la posibilidad de sufrir otra derrota no veían interés suficiente en esas agrestes montañas sin un gran interés económico

    Esto posibilitó la organización de una resistencia cristiana hispanovisigoda que sin duda fue el origen de la reconquista de España

    Negar esto sólo puede deberse a intereses políticos en deformar la historia

    1. A ver, lo cierto es que la batalla no fue más que una escaramuza. Eso de que llegó el ejército musulmán… En realidad, fueron unas pocas tropas, y la batalla no fue ni de lejos tan grande como dice la historiografía.

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