Una de las industrias más beneficiadas durante el confinamiento fue el sector del juego en general; casino, apuestas, videojuegos, etc. Por ejemplo, empresas como Paston Casino, supieron llevar lo mejor de la oferta de juegos de casino a cualquier dispositivo, permitiendo que los usuarios pueden jugar a cualquier hora y desde donde estén. Esto es una ventaja para quienes aman las apuestas deportivas y quieren seguir algún evento en vivo desde su móvil.
Otras opciones como Betsson Casino también llevan la experiencia de juego a otro nivel, ya que cuentan con una sección de Casino en Vivo y promociones que se actualiza regularmente. Está diseñada para usuarios que buscan una mayor variedad de juegos en un solo lugar.
Sin embargo, esta racha de suerte se produjo solamente en la modalidad de juego online. Recordemos que un montón de casinos y centros de juego físicos siguen cerrados debido a las restricciones del covid-19. ¿El mundo del juego digital pudo compensar las pérdidas del juego físico? Lo cierto es que, con la posibilidad de una vuelta a la normalidad muy cerca, muchas empresas tienen esperanzas en recuperar las pérdidas económicas del 2020.
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¿Las personas apostaron más dinero durante el confinamiento?
Si bien es cierto que hubo un mayor incremento de la actividad en los casinos online durante el confinamiento, los usuarios cada vez apostaban menos dinero real. Recordemos que muchos casinos cuentan con simuladores para que los usuarios experimenten con algún juego antes de apostar dinero. Si bien muchas empresas de juegos online se hicieron populares durante el encierro, no necesariamente ganaron más dinero.
De hecho, el sector del juego en España solo pudo facturar 2049 millones de los 5000 millones de euros que ingresaron durante el 2019, produciéndose un descenso del 24% de las ganancias. Los ingresos generados por el juego online no pudieron compensar las pérdidas en casinos, bingos, salones de juego y maquinas recreativas en bares.
¿Qué otras industrias se ven afectadas por la crisis en el sector del juego?
La industria del juego se lleva a cabo dentro del ecosistema de la hostelería, por lo que es una de las áreas más afectadas por el covid-19 en múltiples sentidos. Muchos casinos y máquinas de juego representaban el “gancho” de los clientes de bares y hoteles que se ven obligados a disminuir el aforo, limitando así el uso de estos equipos. Además, muchos usuarios tocan estas máquinas a lo largo del día, por lo que las medidas de higiene para manipularlas deben ser estrictas.
¿Qué le espera al sector del juego en 2021?
Aún cuando el sector del juego online haya tenido un crecimiento del 15% durante este año, se espera que el juego presencial vuelva a la normalidad una vez que se flexibilicen las restricciones de aforo y horarios. Si se reanuda la afluencia en los bares y salones de juego, las personas volverán a reunirse y esta modalidad de juego volverá a crecer, por lo que se descarta la idea de que esta actividad migre completamente al sector digital.
Además, no olvidemos que el Ministerio de Consumo inició un nuevo debate sobre la Ley del Juego, para implementar prácticas que permitan crear un entorno de juego más seguro. Esto significa más restricciones para el sector del juego y un apoyo mayor para los padres que necesitan monitorear la actividad de sus hijos en el mundo online, así como para las personas que pueden poner en riesgo su bienestar mental y financiero a causa de esta actividad.
Por los momentos, las empresas se enfocan en volver a activar las operaciones en todos los mercados, mientras reestructuran su deuda para conservar algo de liquidez e intentan alcanzar un flujo de caja positivo. Sin embargo, si todo marcha bien, se espera que a finales del 2021 o principios del 2022 el mercado del juego se normalice.