Esta mañana en el Pleno del Congreso de los Diputados, el presidente del Gobierno,Pedro Sánchez, se ha mostrado «consternado» por el «terrible» asesinato del periodista Jamal Khashoggi en el consultado saudí en Turquía. Después de condenar con rotundidad el asesinato del periodista saudí, ha asegurado que el Gobierno va a actuar «con responsabilidad» y que España seguirá vendiendo armas a Arabia Saudí «en defensa de los intereses» del país y de los trabajadores de Navantia donde se van a construir cinco corbetas para el Estado saudí.
Sánchez condena "sin paliativos" el asesinato de Khashoggi y pide que que se investiguen los hechos para que "la justicia actúe" y "caiga todo el peso de la ley" sobre los responsables del "terrible crimen" https://t.co/yxDAHsmQRV pic.twitter.com/S1ULlEfDq8
— RTVE Noticias (@rtvenoticias) October 24, 2018
«El Gobierno hace todos los esfuerzos para defender la paz mundial, los derechos humanos y la libertad pero debemos tener en cuenta las empresas que operan en otros países, a los ciudadanos españoles y la necesidad de mantener su subsistencia», ha dicho el Jefe del Ejecutivo.»Tengo que estar hoy y aquí en la defensa de los intereses de España, de sus intereses estratégicos, que además están situados en zonas devastadas por el drama del desempleo«, ha añadido Sánchez.
Sánchez quiso dejar claro que las licencias de exportación de armas fueron autorizadas por el Gobierno de Mariano Rajoy el 13 de noviembre de 2015, con una vigencia que «se amplió» en los años 2016 y 2017. Los contratos están «en vigor», cumplen con los requerimientos legales y «no entran en contradicción» con las instrucciones dadas por el Consejo de Seguridad de la ONU. Para concluir su comparecencia, Sánchez pidió a la oposición «altura de miras» para apoyar al Gobierno de España en una cuestión que «interesa al conjunto de la sociedad española».