Cuando parecía que por fin salíamos de la recesión iniciada en 2008 por la crisis bancaria, la pandemia de Covid nos arrastró a otra. Por desgracia, muchas personas perdieron el empleo o vieron reducidos sus ingresos. Por eso, más que nunca, es necesario repasar algunos de los consejos de ahorro más importantes para superar una crisis. Te hemos seleccionado 10 recomendaciones que no puedes perderte.
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#1 Evita los créditos personales
Es muy tentador querer tirar de una tarjeta de crédito o de un préstamo personal para superar una situación difícil en tus finanzas personales. Pero, lo cierto es que es un remedio peor que la enfermedad. En la inmensa mayoría de los casos, recurrir al crédito en esas situaciones solamente empeora las cosas. Es mucho más recomendable hacer sacrificios y reducir drásticamente los gastos, por incómodo que sea. A la larga, compensa, y mucho.
#2 Busca consejos para ahorrar en crisis
Una de las grandes ventajas de nuestros tiempos es que tienes mucha información disponible gratis en Internet. Por ejemplo, si buscas ideas para ahorrar en tu vida cotidiana, puedes acudir a un blog especializado como Ideas y Ahorro, que tiene cientos de recomendaciones para explicarte en detalle como ahorrar dinero y mejorar tus finanzas personales. Por supuesto, hay más páginas y publicaciones, así que busca la que más te convence, y empieza a tomar acción en tu vida.
#3 Programa una transferencia automática
Si no quieres gastarte todo lo que ingresas, la solución más eficiente para ahorrar es que programes una transferencia automática desde la cuenta donde recibes tus ingresos hacia una cuenta de ahorro. De esa manera, no tendrás tentaciones de ir gastando lo que tengas disponible. Puedes empezar con una pequeña cantidad, de unas decenas de euros al mes, y luego aumentarla cuando te acostumbres a vivir con menos dinero. Así te estarás creando una pequeña reserva de dinero, para emergencias o para invertir.
#4 Haz un presupuesto de gastos
Te sorprenderías si supieras la cantidad de compras que hacemos que no son tan necesarias. Eso sucede, en parte, porque muchas personas no planifican sus gastos. Van comprando las cosas sobre la marcha, y no diferencian entre los esencial y el capricho del momento.
Una buena forma de racionalizar tus gastos es establecer un presupuesto. Puedes empezar por listar todo lo que gastas en un mes. Luego, analizas cada partida, y miras si la puedes reducir, suprimir, o si no hay más remedio que pagarla. Enseguida verás como hay muchos gastos que no son imprescindibles y de los cuales podrías prescindir. A partir de tu análisis, determinas un presupuesto mensual, y luego, evidentemente, tienes que cumplirlo. Basta con un poco de voluntad.
#5 No hay gasto que no se pueda reducir
Seguramente, cuando revises tus principales gastos, tengas el reflejo de pasar rápidamente algunas partidas, suponiendo que no se pueden tocar. Me refiero a la factura de la luz o del agua, al servicio de Internet o incluso al alquiler de la casa donde vives. Pero, la realidad es que casi siempre se puede hacer algo, o, al menos, intentarlo. Puedes bajar tus facturas de suministros reduciendo tu consumo y cambiando de proveedor. Puedes hablar con el propietario de la casa y negociar una bajada del alquiler, especialmente si los precios están bajando. Hasta se pueden renegociar las condiciones de una hipoteca, aunque hay que reconocer que puede ser difícil.
Lo importante no es conseguir reducir todos los gastos. Eso sería casi imposible. No, lo importante es no suponer que algún gasto es intocable. Si intentas rebajar cada uno de tus gastos, ya verás como algunos que no imaginabas acaban bajando, simplemente porque lo intentaste y no diste por sentado que era imposible.
#6 Compara antes de comprar
Vivimos en una era de comparadores de Internet, que te permiten elegir entre vuelos, seguros, servicios de telefonía y muchas cosas más. Hasta el Banco de España tiene un comparador de comisiones de bancos. Pero, más allá de lo que puedes hacer online, si quieres ahorrar, tienes que acostumbrarte a comparar antes de gastar. Desde mirar las cartas de varios restaurantes antes de elegir uno hasta pedir presupuestos a varias empresas de reforma para esas obras que tienes en casa, comparar siempre viene bien.
Por supuesto, cuanto más caro sea lo que tienes pensado comprar, más tendrás que comparar para asegurarte de haber elegido la mejor relación calidad-precio.
#7 Para ahorrar en crisis, piensa antes de comprar
Si tienes la tendencia de hacer compras compulsivas, este consejo es muy importante para ti. Es muy sencillo. Se trata simplemente de demorar la compra, para darte tiempo de pensar si realmente necesitas hacerla.
Si estás en el supermercado y de repente te llaman la atención unas golosinas, simplemente déjalas allí y sigue comprando lo que tenías en tu lista. Si dentro de unos minutos, te sigue pareciendo una buena idea comprarlas, adelante. Pero en la mayoría de los casos, habrás recapacitado.
Para otras compras, como por ejemplo dispositivos electrónicos o cualquier otra cosa que podrías conseguir por Amazon o Aliexpress, lo recomendable es que te esperes antes de comprarlos. Suelen ser cosas que no necesitas urgentemente. Así que te puedes esperar un mes. Y ya verás cómo en ese tiempo tus prioridades habrán cambiado, y ya no querrás comprarlo en un alto porcentaje de casos.
#8 Racionaliza tu compra semanal
Justo antes mencionaba la lista de la compra. Es uno de los elementos fundamentales para ahorrar cuando haces la compra semanal. Los supermercados están llenos de tentaciones, y tu mejor arma para comprar solo lo que necesitas es preparar una lista antes de salir, y cumplirla a raja tabla.
Por supuesto, hay más trucos para ahorrar en el súper. Por ejemplo, puedes comprar más marcas blancas. También es recomendable elegir carnes más económicas, como aves y cerdo, en lugar de ternera. Intenta no ir a comprar con hambre, ya que te empuja a comprar snacks y platos preparados. Tampoco te lleves a los niños, ya que a veces nos convencen para llevarnos productos que no habíamos planeado.
#9 Busca otros ingresos
Reducir gastos es muy importante, pero tiene un límite. Si tus ingresos son muy bajos, será difícil que puedas ahorrar. En ese caso, lo importante es buscar nuevos ingresos. Y las posibilidades son mucho más numerosas de lo que crees. No todo se resume a conseguir un mejor trabajo. Hay muchas formas de conseguir ingresos extras. Puedes recomendar los productos y servicios que usas a familiares y amigos, y conseguir pequeñas compensaciones económicas. Puedes ganar dinero por Internet de múltiples maneras. Puedes realizar pequeñas tareas como dar clases, cuidar niños, y mucho más.
#10 Invierte los ahorros
Si consigues ahorrar, es importante sacarles partido a tus ahorros. Hazlo con prudencia, especialmente si te ha costado mucho ahorrar. Empieza con productos de poco riesgo, como depósitos a plazo, que te darán poca rentabilidad, pero ya será mejor que tener el dinero desaprovechado en una cuenta sin intereses.
Luego, cuando tengas más patrimonio, puedes ir repartiendo tus fondos entre diversas estrategias, con algunas con más riesgo y más rentabilidad potencial, por ejemplo, en la bolsa.
Pero recuerda siempre esas tres máximas: reparte el riesgo, invierte solo en lo que entiendes perfectamente, y cuando te prometen una alta rentabilidad es que el riesgo es alto.