Estas elecciones son un ensayo general de las elecciones presidenciales de octubre para las cuales el presidente saliente busca un segundo mandato.
El domingo 11 de agosto, el presidente liberal argentino, Mauricio Macri, sufrió un duro golpe del peronista de centro izquierda y ex primer ministro Alberto Fernández en las elecciones primarias, que generalmente marcan una fuerte tendencia antes de las elecciones presidenciales.
Según los resultados parciales en el 58.7% de los colegios electorales, Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, la ex presidenta del país, obtuvieron el 47.01% de los votos, en comparación con el 32.66% del tándem compuesto por Mauricio Macri y el líder peronista Miguel Angel Pichetto.
Si dicho resultado se repite en las elecciones presidenciales del 27 de octubre, el Sr. Fernández, de 60 años, sería proclamado ganador en la primera vuelta, ya que de acuerdo con la ley electoral en Argentina, es suficiente obtener al menos el 45% de los votos, o bien 40% y una ventaja de diez puntos sobre el segundo candidato.
«Hemos tenido una mala elección y eso significa que a partir de mañana tendremos que redoblar nuestros esfuerzos. Lamentamos no haber tenido todo el apoyo que esperábamos «, reconoció rápidamente el jefe de Estado de la tercera economía de América Latina, sumido en una grave crisis económica.
«A los que votaron por mí, les prometo trabajar para que me entiendan. Vamos a comenzar una nueva etapa» , felicitó Fernández, frente a una multitud de varios miles de seguidores.
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«Una diferencia (…) difícil de superar»
Creado en 2009, el sistema de primarias generales para todos los partidos políticos, el mismo día en una encuesta nacional, es una peculiaridad argentina. En este país donde votan casi 34 millones de argentinos, es más bien una encuesta a tamaño real antes de las elecciones generales de octubre, los partidos políticos han elegido este año, por razones de estrategia electoral. , para invertir de antemano a sus candidatos según lo permita la ley.
Desde 2009, los puntajes de las encuestas presidenciales han estado en línea con las encuestas primarias. «Una diferencia de más de cinco puntos será muy difícil de superar, porque no hay margen para encontrar votos debido a la polarización» del país, había explicado antes del resultado el analista político Raúl Aragón.
Otra peculiaridad, los peronistas se presentaron en tres campos diferentes. El ex ministro de Economía Roberto Lavagna y su compañero Juan Manuel Urtubey, que representaban la tendencia centrista del peronismo, llegaron en tercer lugar con el 8,7% de los votos.
Romper con la política de izquierda
Alberto Fernández, jefe del gobierno de Néstor y luego Cristina Kirchner entre 2003 y 2008, hizo campaña al jurar haber roto con las políticas de izquierda seguidas en el pasado y reenfocadas.
Para sorpresa ya que fue líder en las encuestas, Kirchner había anunciado el 18 de mayo su retirada, dejando correr a Fernández para la silla del presidente que desempeñó de 2007 a 2015. Acusado en varios casos de corrupción, La ex presidenta conserva una influencia decisiva en el partido Unidad Cívica que fundó e invirtió Alberto Fernández. Su boleta electoral fue presentada bajo una pancarta recientemente creada y llamada «El Frente de Todos» .
Mientras tanto, Mauricio Macri, de 60 años, lo sorprendió al elegir dirigir al líder peronista Miguel Ángel Pichetto, rompiendo con su doctrina que lo había llevado a alejar a los peronistas de su gobierno.
En total, diez parejas se disputaron las elecciones presidenciales, la primera ronda tendrá lugar el 27 de octubre, mientras que la segunda está programada para el 24 de noviembre. Durante las elecciones generales del 27 de octubre, los argentinos también renovarán parcialmente las dos cámaras del Parlamento, cuyos candidatos también se presentan en las primarias este domingo.