¿Qué es la auténtica cocina? Es esa donde desde la selección de los ingredientes hasta la preparación de un recetario se siguen los criterios de la personalización, de la adopción de estilos propios y de estándares de calidad que sin dejar de ser artesanales, puedan garantizar resultados profesionales, y deliciosos, claro está.
Así, La Carloteña, una de las marcas de referencia en charcutería, productos loncheados, recetas navideñas y demás productos preparados congelados, se ha convertido en una de las marcas que llevan el concepto de la auténtica cocina a niveles importantes, razón de que su trayectoria y sus productos sean la mejor muestra de su compromiso con la calidad y el sabor, que no es poca cosa.
Pero, ¿cuáles son esas cualidades que dan vigor al concepto de la “auténtica cocina” alrededor de esta marca?
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La selección de cada ingrediente
El mayor nivel de calidad posible. Ese es el primer criterio que toman los expertos de la marca para elegir los ingredientes que formarán parte de su catálogo de recetas y preparados.
Hacerlo posible, para ésta y para cualquier marca, es cuestión de análisis, de pruebas y de mucha investigación, razón de que su departamento de I+D sea uno de los mejor valorados de la industria culinaria, por los consumidores y por los profesionales que utilizan sus productos como la base de sus platos.
Todos sus productos, además, son auténticos e incluyen denominaciones claras de su producción y origen, utilizando siempre ingredientes que tengan procesos de producción respetuosos con el medio ambiente, cuidadosos en la consecución de la máxima calidad posible, y que sean de origen nacional.
El estilo
En un mercado tan competitivo y con tantos actores principales, diferenciarse y formar parte de la mesa de los españoles es cuestión de tener señas de identidad que resulten inconfundibles. O lo que es igual, tener un estilo que sea sinónimo de su buen hacer.
El estilo, en La Carloteña, es una combinación de variedad, salud y sabor, siendo todos estos aspectos, los principales atributos de cada una de sus recetas.
Así, la gama de productos, desde su catálogo hasta sus platos horneados para Navidad, es tan variada como saludable, intentando adaptarse a las costumbres, a las horas, a los momentos importantes y al estilo de vida de sus clientes y consumidores.
El proceso de preparación
A pesar del rápido crecimiento de la marca, estando al alcance en casi cualquier parte del territorio nacional, su proceso de preparación de cada receta sigue los mismos pasos artesanales de siempre. Una característica que se convierte en cualidad cuando se cuenta con profesionales culinarios de dilatada trayectoria, expertos que seleccionan los mejores ingredientes, que las combinan de acuerdo a sus estilos y a las peticiones de sus clientes, logrando obtener una preparación artesanal, cálida, cercana, donde el buen sabor y la calidad son los objetivos predilectos.
Los recetarios, su secreto mejor guardado
Únicos y diferentes. Si se tuvieran que calificar todos los productos que La Carloteña lanza al mercado, la respuesta sería exactamente esa.
Sus recetarios, premiados por expertos y reconocidos por sus consumidores, dan muestras claras de cuál es la cualidad que realmente diferencia a esta marca española, y que ofrecen la justificación sobre por qué cuentan con una alta preferencia, a pesar de la competitividad de un mercado tan subjetivo.
Especialidades de cerdo, de pollo o de pavo, sin dejar de lado ‘lo gourmet’, lo saludable, lo campestre, lo ecológico, y brindando la importancia debida a la innovación en sus mercados de loncheados y platos preparados, La Carloteña da muestras claras de lo que es la auténtica cocina.
¿Qué es, entonces, la auténtica cocina? Escoger los mejores ingredientes disponibles, utilizar los mejores profesionales y expertos culinarios para convertir la materia prima en recetas originales, innovadoras, pensando siempre en la variedad, la salud y el sabor, pero sin descuidar un ápice del estilo que caracteriza a una marca. Es así como La Carloteña se ha convertido en uno de los principales nombres en la mesa de los españoles.