El juego online se ha convertido en uno de los pasatiempos preferidos de los españoles. Dentro de esta categoría de juego en línea aparecen tanto las apuestas deportivas como los juegos de casino, entre los que se incluyen la ruleta, el blackjack, el póker y, por supuesto, las máquinas tragaperras.
A día de hoy, las máquinas tragaperras son el juego más popular de los casinos físicos y online, tanto en España como en el resto del mundo.
En España se legalizaron estas máquinas en 1981, y lo hicieron con una particularidad: las tragaperras, además de tener que estar ubicadas en los casinos, como ocurría en muchos otros países, podían instalarse en otros lugares públicos como bares y cafeterías. Este hecho es una de los principales motivos por los que las tragamonedas tienen tantos seguidores y aficionados en nuestro país.
Contenido
Hacia un nuevo siglo
A finales del siglo pasado, y con la cada vez mayor pujanza de internet, apareció en escena el juego online. En esa etapa inicial todo el proceso para poder jugar a los habituales juegos de casino, como las tragaperras, era muy farragoso. De hecho, para poder jugar había que instalar el software en el ordenador y para ello había que recibir el CD de instalación por correo postal.
Con el paso de los años y con la mejora de las conexiones a internet –a día de hoy resulta una locura pensar que, en los primeros años, navegar por la red bloqueaba la línea telefónica en una época en la que los móviles eran una excepción y no la norma general- el acceso al juego online se fue simplificando.
El crecimiento de las apuestas y de los casinos en línea puso en alerta al Gobierno que el 27 de mayo de 2011 promulgó la Ley del Juego, vigente en la actualidad, mediante la cual se controlaba y gestionaba todo lo relativo a los juegos de azar, a las apuestas y a los casinos. Desde entonces, cualquier operadora de juego que quiera ofrecer sus servicios en España está obligada a tener la aprobación de la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ) y una licencia expedida por este organismo.
Las tragaperras: renovarse o morir
Mucho ha cambiado aquel juego que hace casi siglo y medio inventara Charles Fey, un mecánico alemán emigrado a San Francisco, pero, en esencia, el juego es el mismo; se trata de hacer girar los carriles y hacer coincidir los diferentes símbolos para obtener un premio.
Las empresas del juego, fieles a su afán renovador, no han parado de intentar innovar, de conseguir atraer a los jugadores con nuevas creaciones, tragaperras online con avances tecnológicos y de concepto que resulten más atractivas para los usuarios.
Al igual que las empresas de videojuegos se empeñan en sacar nuevos títulos, en contar nuevas historias y en ofrecer experiencias vibrantes, las desarrolladoras de juegos en línea trabajan con la misma ambición: crear nuevos títulos mejorados, rápidos, llamativos, que sean capaces de entregar estímulos redondos a los jugadores.
Las tragaperras han ampliado los carriles, las líneas de pago, los premios, han mejorado los gráficos y el sonido y hasta han introducido fragmentos de vídeo. Jugar a las máquinas tragaperras en la actualidad es una experiencia mucho más completa y divertida que años atrás.