Un currículum representa una carta de presentación que resume la preparación profesional de una persona. Su misión es comunicar el conjunto de habilidades, destrezas, conocimientos y competencias que tiene un candidato de forma organizada para que el reclutador o empleador pueda seleccionar aquel que posea el perfil que mejor se adecúa a una determinada vacante.
Las habilidades personales resultan un asunto de vital importancia para los reclutadores o empleadores. Existen diferentes tipos de ellas y muchas dudas sobre cómo aportar tus habilidades personales en el curriculum, además de errores comunes que suelen cometer los candidatos, como exagerar las mismas para llamar la atención del encargado de la selección.
¿Cuáles son los tipos de habilidades personales?
Las habilidades pueden dividirse en dos tipos, habilidades personales y sociales. Estas también son conocidas como habilidades blandas o soft skills, diferenciándose de las técnicas, o hard skills al ser competencias que no se adquieren de forma teórica, sino que provienen de nuestra experiencia y formación, por lo que tenemos mayor injerencia en su desarrollo potencial.
Dentro de un entorno laboral tan competitivo como el que se presencia actualmente, los candidatos pueden aprovechar las habilidades personales para destacar entre sus pares, desarrollando habilidades “deseables” o de algo valor para las organizaciones. Sin embargo, no podemos incluirlas todas, debemos priorizar y destacar aquellas que se ajustan al perfil al cual se aspira.
Algunas de las habilidades que suelen ser buscadas por la mayor parte de las organizaciones, y que conviene mencionar en el CV, son las que mencionamos a continuación:
- Capacidad organizativa. Dado que la mayor parte de los trabajos exigen al empleado la realización de diversas tareas, este debe ser capaz de priorizarlas y organizar su tiempo para cumplir con todas ellas.
- Comunicación verbal y escrita. Aunque muchos puestos de trabajo no requieren de esta habilidad, es un plus bastante significativo y fácilmente demostrable presentando un CV bien redactado.
- Facilidad para el trabajo en equipo. Es bueno resaltar que se tiene la habilidad de coordinar acciones con el resto de compañeros para cumplir con las tareas encomendadas de manera eficiente y trabajar por objetivos o metas conjuntas.
- Liderazgo. No importa si el cargo al cual postulas no lo requiere, siempre es una buena idea incluir la capacidad de liderazgo en el CV, puesto que implica que también puedes resolver problemas y tomar decisiones con autonomía en atención a los objetivos.
- Creatividad. Tanto la creatividad como la innovación son dos de las habilidades personales más demandadas en el mercado laboral actual. Las empresas del siglo XXI esperan colaboradores capaces de generar ideas de alto valor para incrementar la eficiencia.
Como recomendación final, es importante que realices una evaluación del perfil al cual aspiras y adaptes tu CV en consecuencia, incluyendo el conjunto de habilidades que sea más adecuado al caso antes de postular. De esta forma puedes tener la garantía de que tus posibilidades de acceder al cargo se incrementen de forma considerable.