La programación ha evolucionado a pasos agigantados, y gracias a esta hoy las aplicaciones y programas de desarrollo de software se han simplificado. Nada de eso sería posible sin la utilización de uno de los más elementales lenguajes: el javascript.
Con el transcurso del tiempo, la programación se ha convertido en una de las áreas más explotadas por profesionales de todas partes del mundo. Gracias a ellos y a sus habilidades hoy en día existen herramientas que facilitan e impulsan la evolución de las tecnologías y con ello, todas las áreas de desempeño. Dentro de la programación, una disciplina muy vasta, existen distintos lenguajes que, aunque trabajan de forma complementaria, tienen propósitos distintos.
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Javascript, ¿el más importante?
Es muy probable que lo hayas escuchado nombrar o que hayas leído el término alguna vez. A menudo se lo confunde con Java, aunque no guardan relación alguna más que la similaridad del nombre y el hecho de que los creadores de Javascript lo llamaron así para darle profesionalismo a un concepto, entonces nuevo.
Para lo demás, son programas absolutamente distintos y, en este caso, es el Javascript sobre el que queremos reparar. Fue inventado durante la década de los noventa, y con el paso del tiempo se ha convertido en uno de los más importantes lenguajes de programación.
Los expertos en JavaScript y las empresas de desarrollo hoy en día manejan un gran número de lenguajes y archivos, como el RxJS, por ejemplo, propio de la programación reactiva. Esta última viene sumando varios seguidores y es gracias a que está compuesta por algunas de las mejores herramientas o patrones. Además, permite gestionar de forma óptima las grandes cantidades de datos que manejan las aplicaciones hoy en día.
Dentro de la programación reactiva, también se implementa el Javascript, así que vamos a profundizar en lo que este significa, para qué sirve y por qué es tan utilizado por los programadores en su trabajo diario. En primer lugar, cabe aclarar que una de sus funciones principales es la configuración de páginas web.
Es decir, se emplea de manera integrada con el HTML para perfeccionar el funcionamiento de un sitio web, brindar mayores índices de interactividad e incluir elementos de animación en sectores como galerías de fotos, multimedia, salas de chat; en resumen, otorgar dinamismo a la experiencia del cliente y desarrollar aplicaciones con ese fin.
Por supuesto, dentro del abanico de posibilidades de todo lo que se puede llevar a cabo con la utilización de lenguaje Javascript hay mucho más, sin olvidar funciones básicas como las variables, los operadores y los condicionales. Estas se encuentran presentes también en buena parte de los lenguajes de programación.
¿Por qué es tan usado?
De los lenguajes de programación existentes, el Javascript es uno de los más versátiles y estables para el desarrollo de aplicaciones, páginas web, programas, entre otros. No es demasiado complejo, lo que significa que tampoco es difícil aprender a usarlo, y tiene una estructura sencilla.
Además, se adapta muy bien a cualquier tipo de sistema operativo tanto como a los navegadores, por lo que es más fácil reducir el margen de error o la posibilidad de anomalías. Como mencionamos anteriormente, también tiene muchos usos y finalidades, pudiendo implementarse de diversas maneras.
Para los usuarios regulares, el Javascript permite navegar a través de una página web de forma ágil y segura, por lo que tiene grandes ventajas tanto para los usuarios normales como para los programadores y desarrolladores. Es también el lenguaje que permite una mayor interacción entre clientes y sitios web, haciéndolos parte de un todo de manera relativamente fácil.
Se combina en muchos casos con otros lenguajes y herramientas de programación, códigos y hojas de estilo. A día de hoy, sigue siendo uno de los lenguajes base: prácticamente todas las empresas y profesionales del sector implementan Javascript. El hecho de que algunas de las más reconocidas empresas de servicios (como Paypal o Netflix) se ejecuten con Javascript, lo dice todo.