Aunque es frecuente identificar el trabajo de un cerrajero únicamente con la atención de aquellas emergencias que tienen que ver con la apertura de una puerta, lo cierto es que los trabajos que estos profesionales pueden desarrollar van mucho más allá. Sigue leyendo si quieres descubrir a qué más se dedican los cerrajeros.
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Los trabajos de un cerrajero
Cuando escuchamos hablar de un cerrajero, lo más normal es que se nos venga a la cabeza una urgencia relacionada con la imposibilidad de acceder a nuestro domicilio porque la cerradura se haya estropeado, hayamos perdido la llave o cualquier otro motivo.
No obstante, las posibilidades de los profesionales del sector de la cerrajería, como un cerrajero 24 horas en Sevilla, van mucho más allá de la atención de las mencionadas emergencias, pues el catálogo de servicios que pueden ofrecer pasan por:
- La apertura de puertas.
- La extracción de llaves rotas dentro de las cerraduras.
- La apertura de cajas fuertes.
- La apertura de vehículos.
- La reparación de cierres de locales comerciales.
- El cambio de bombines.
Es decir, que la realidad es que los cerrajeros son unos trabajadores excelentemente formados para atender todo tipo de situaciones relacionadas con la seguridad de nuestro hogar y, por supuesto, de quienes residan en él.
En este sentido, conviene apuntar la obligación legal que estos trabajadores tienen de llevar un registro minucioso de los trabajos que realizan, y el hecho de que para poder desarrollar su trabajo con todas las de la ley, deben cumplir unos requisitos que hacen que sus trabajos puedan contar con todas las garantías.
Algunos ejemplos de sus trabajos
Como decimos, los cerrajeros como Hermanos Carrillo ofrecen un catálogo de servicios muy superior a los que comúnmente se conoce. Por ejemplo, uno de los servicios más interesantes y que tienen más utilidad en los tiempos que corren es la sustitución de las cerraduras corrientes por las más modernas antibumping, pues su instalación es sinónimo de un aumento importante de la seguridad en nuestro domicilio.
En efecto, una de las técnicas más empleadas por los ladrones a la hora de intentar robar en una casa es el bumping, que consiste en insertar una llave manipulada en el cilindro de la cerradura y golpearla hasta que los pistones salten y permitan entrar en una casa sin ningún tipo de dificultad.
Para minimizar las posibilidades de sufrir un ataque de este tipo, la mejor forma es instalar una cerradura preparada para ello, dado que aunque no eliminan completamente la posibilidad de ser forzadas por el medio que acabamos de comentar, las cerraduras antibumping obligan a los ladrones a emplear más tiempo en abrirlas, lo que hace que en muchos casos desistan de sus intenciones tan pronto como se encuentran ante una de estas cerraduras de seguridad.
Otro de los servicios que son poco conocidos y que ofrecen los cerrajeros profesionales pasa por la solución de un problema al que muchos de nosotros hemos tenido que enfrentarnos sin romper la cerradura: la rotura de una llave dentro de la misma.
Al respecto, cabe decir que, fruto de su formación y de su experiencia, los cerrajeros son expertos conocedores del funcionamiento de las cerraduras y, además, disponen de todas las herramientas necesarias para, en casos como éste, poder abrirlas sin necesidad de romperlas, lo que obviamente, supone un ahorro extra para sus clientes.
Ahora bien, en este punto conviene insistir en la idea de que estos profesionales están obligados a cumplir con una serie de requisitos legales que aseguran que no van a utilizar esos conocimientos para cometer actividades delictivas, como el registro de actuaciones antes comentado.
En consecuencia, cabe concluir que la cerrajería es un arte que va mucho más allá de la atención de las emergencias, y además, es un oficio practicado por personas honestas y muy solventes en el ámbito profesional.