El despido improcedente es uno de los problemas legales en el ámbito de la empresa que más abordan los abogados en Madrid: en una ciudad con tantísimas compañías, cada día se producen cientos de ceses de contratos con los que el trabajador no está de acuerdo.
¿Cómo actuar en estos casos? ¿Qué hacer desde el punto de vista legal para cubrirse las espaldas? ¿Qué hay que tener en cuenta para iniciar una reclamación frente al empresario? Desde Basilea Abogados, un despacho de Abogados Especialistas en Despidos Improcedentes, ofrecen una serie de consejos para los trabajadores.
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¿Qué es el despido improcedente?
Antes de entrar en detalle, es importante entender en qué supuestos se puede hablar de despido improcedente.
El despido improcedente en nuestro país se da en aquellas ocasiones en las que el empresario decide, por su cuenta, finalizar la relación laboral con el trabajador sin justificación alguna.
Si el empleado no acumula ningún tipo de reclamación o sanción o si la empresa no tiene problemas económicos, estaríamos ante un caso de despido improcedente.
Pero estos no son los únicos escenarios posibles: hablamos de despido improcedente también cuando el empresario o el equipo de Relaciones Humanas no actúa conforme a la legalidad y no indica el despido de la manera correcta, con el preaviso suficiente o sin liquidar al trabajador los pagos que le corresponden.
En todas estas circunstancias es posible hacer uso de la ley para que el trabajador sea readmitido o indemnizado por la situación. Para hacer más fácil esta reclamación, desde Basilea Abogados recomiendan seguir los siguientes pasos.
Consejos para afrontar un despido improcedente
Lo principal y más efectivo es buscar ayuda legal desde el primer momento. Un abogado especializado será quien mejor pueda estudiar el caso y marcar cada paso que se dé para tener todas las herramientas para negociar ante el juez.
Sin embargo, en aquellos escenarios en los que esto no es posible para el trabajador, se pueden tener en cuenta las siguientes precauciones:
- Rechazar el despido: aunque es necesario firmar la carta de despido, será muy relevante que en ella el empleado escriba algo como “NO CONFORME”, para que conste en todo momento. En el documento también ha de aparecer la fecha de firma, puesto que los plazos de actuación son muy ajustados.
- No coger dinero: el empleador puede agarrarse al hecho de que el exempleado aceptó el dinero que le daba en concepto de liquidación de contrato. En este sentido, es mucho mejor no coger ese dinero de momento, ya que pueden ser ilegal.
- Obtener toda la documentación relativa al trabajo y al despido: solicitar al empleador una carta donde explique los motivos del despido, recopilar el informe de cumplimiento horario y otros elementos similares serán clave para armar una buena estrategia de defensa.
Estos son algunos de los consejos más importantes a la hora de abordar una situación tan delicada como la de un despido improcedente. Como explican en Basilea Abogados, dar cada uno de estos pasos con ayuda de un especialista en el ámbito laboral es la mejor garantía de que un juez dictamine con justicia en el caso de que el despido sea efectivamente improcedente.