La evolución epidemiológica de España es una de las más preocupantes de la UE, y la comunidad de Madrid es uno de los territorios con la situación más crítica y donde la gestión de la crisis es un caos. De hecho, la situación es «extraordinariamente» preocupante y desalentador, según el informe que el grupo de investigación de biología computacional y sistemas complejos de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) elabora semanalmente sobre la situación de la pandemia en el Estado español a petición de la Comisión Europea. En su último documento destaca el riesgo de rebrote de la comunidad de Madrid, que se sitúa en 783 puntos, 425 más que la media del Estado.
El gobierno del PP y Cs de la comunidad de Madrid admitió ayer que la situación no va bien, pero la gestión de la crisis sigue siendo un desorden.
La situación es tan preocupante que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, envió una carta a la presidenta del gobierno madrileño, Isabel Díaz Ayuso, proponiéndole una reunión «lo antes posible» y ayudar en la gestión de la crisis.
Poco antes, el vicepresidente y portavoz del gobierno madrileño, Ignacio Aguado (Cs), admitió que la situación no iba bien y que necesitaban la ayuda del gobierno del Estado. Ayuso aceptó el ofrecimiento de Sánchez, pero aprovechó la ocasión para criticarlo diciendo que había «sentido sola». Al cierre de esta edición, sus equipos intentaban cuadrar agendas para que el encuentro se haga tan pronto como sea posible.
Desde hace semanas, el número de casos de Covid-19 iba aumentando en Madrid, pero el ejecutivo se resistía a adoptar medidas restrictivas como le reclamaban otras comunidades autónomas, hasta el punto de quedar la pandemia fuera de control. Ante esta situación, el miércoles el viceconsejero madrileño de Sanidad anunció confinamientos selectivos, pero nadie del gobierno sabía nada. Ayuso lo supo por móvil poco antes y dejó la medida en suspenso.
Esto dejó al descubierto el caos en la gestión de la pandemia en Madrid y abrió una crisis de gobierno que ayer Aguado intentó cerrar con una comparecencia. Hizo la rueda de prensa que debía haber ofrecido el miércoles y no hizo, molesto por no saber nada de los confinamientos, y en la comparecencia Aguado cerró filas con Ayuso. No informó de ninguna medida para frenar la Covid-19 para que el gobierno madrileño no había aprobado ningún -lo hará hoy-, pero aprovechó la ocasión para eximir de responsabilidades del ejecutivo madrileño en la situación.