Desde el año 2015, la Organización de las Naciones Unidas ha desarrollado una lista de 17 objetivos de desarrollo sostenible (ODS) que pretenden ser una guía mundial para los próximos 15 años (2015-2030) en materia de sostenibilidad. Esta guía pretende adoptar medidas que logren acabar con los grandes problemas del planeta en tres dimensiones: económica, social y medioambiental.
Los ODS no son de aplicación obligatoria pero cada vez más empresas desarrollan iniciativas ambientales y sociales en su estrategia de negocio. Muchas empresas se han dado cuenta de que implementando las ODS pueden conseguir nuevas oportunidades de negocio, reducir sus gastos, al mismo tiempo que mejoran su reputación y fortalecer su imagen de marca.
Para ello se apoyan en la economía verde y circular que trae consigo un cambio de modelo económico y cuya estrategia es imprescindible para el desarrollo sostenible. Es decir, el compromiso debe ir ligado al uso responsable de los recursos, la valorización de los residuos, el ecopackaging y en la gestión responsable en la cadena de suministro, cuidando todo el proceso desde que se realiza la compra sostenible de materia prima hasta que llega al consumidor final.
Los avances tecnológicos ayudan enormemente a que este proceso se consiga con una mejora en la productividad sin perjudicar el medio ambiente ni reducir los recursos existentes.
La sostenibilidad es rentable
Está demostrado que las empresas que no avanzan en el desarrollo sostenible pierden cuota de mercado. Las encuestas demuestran que los consumidores no sólo quieren productos buenos y seguros, sino que también quieren tener la seguridad de que se producen de manera sostenible.
Algunas de las iniciativas que han liderado empresas españolas:
- Aplicar métodos de pesca sostenible fomentando la salud de los océanos.
- Promover medidas para mejorar el impacto ambiental y social del cultivo del algodón.
- Introducción de embalajes ecológicos elaborados con material reciclado y certificado (FSC, PEFC…)
- Reducción de consumo de papel y plástico a través de optimización de especificaciones técnicas.
- Políticas de eficiencia energética minimizando el consumo de energía en los procesos de la empresa y reducción de emisiones de GI (Gases efecto invernadero)
- Mejoras en la gestión y tratamiento de los residuos.
- Políticas de movilidad eficiente, reduciendo la huella de carbono mediante la adquisición de vehículos eléctricos.
- Eficiencia en el transporte de mercancías; reduciendo emisiones de CO2, consumo de combustible y mejorando la productividad de las rutas.
Muchas de estas iniciativas van ligadas a la obtención de premios (Lean&Green, Lidera, Generacción, premios europeos…), certificados (IPC, FSC, MSC, UTZ…), sellos (etiqueta ecológica europea, etiqueta de consumo energético, sello Fairtrade, sello FSC…), lo que hace fortalecer la imagen de marca en el mercado.
Es importante que las compañías empiecen a concienciarse de lo importante que es sumarse a la hoja de ruta que marca la ONU. Y el papel de la Unión Europea y el Gobierno es muy importante en esta transición, para ello, ya están aplicando nuevas regulaciones enfocadas a primar una economía verde y a castigar la economía marrón.
Algunos ejemplos son:
- Nuevo recargo IMO 2020 que aplican las navieras desde 1 de enero de 2020 de acuerdo a la Regulación de Emisiones de Sulfuro del combustible para controlar la contaminación atmosférica ocasionada por los buques
- Incremento de la ECOTASA este año del 57% para consumos de material PET PE penalizando así a los productos no reciclables y primando los productos monomateriales.
- Nuevo impuesto en la compra de billetes de avión.
- Directiva de la Unión Europea 2019/904 relativa a la reducción del plástico de un solo uso que obliga a los estados miembros a velar por llegar a un 90% de recogida de botellas de plástico, y éstas deberán tener un contenido reciclado mínimo del 25 % para 2025 y del 30 % para 2030.
Montserrat Cotelo García es Licenciada en A.D.E y executive MBA, con más de 15 años de experiencia en dirección de proyectos globales de optimización de costes, mejora de supply chain y operaciones en diferentes sectores. Actualmente es Technical Manager en la unidad de consultoría de Compras de Euro-Funding.